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Bruselas es, junto con Madrid, Londres y Berlín, una de las ciudades que más visito. Hace diez años la visitaba por primera vez con 8 amigos. Era uno de mis primeros viajes como mochilero. Hoy, la visito en una falsa soledad y sin dudar que hacer un fin de semana en Bruselas.
El fin de semana que describo ocurrió en Septiembre de 2015, hace casi 2 años. Tardé tanto en escribirlo que el atentado en su aeropuerto me detuvo en el momento de apretar “publicar”. La realidad, en cambio, es que es un fin de semana muy apetecible aun hoy en día sin que cambie demasiado el precio o el ambiente. ¿La excusa de aquella enésima escapada a la capital belga?, la capitalidad de la cultura europea en Mons, una de las pocas ciudades belgas que no había visitado. Como siempre, Bruselas se convertía en la base de llegada y salida.
Lo primero es lo primero. No pierdas ni tiempo ni dinero de camino al centro desde el aeropuerto de Bruselas.
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Algunos consejos locales para descubrir Bruselas.
Pero vayamos a lo interesante, que es descubrir Bruselas de manera rápida, económica y con un toque local que sin duda marcará la diferencia. Os adelanto, de todas formas, que este recorrido no es para los “primera vez en Bruselas”. Mi primer consejo para saber que hacer un fin de semana en Bruselas es visitar el centro de información para jóvenes viajeros de USE IT Europe. Allí encontrarás una lista de actividades para cada día de la semana, además de llevarte un mapa diferente que te guía mucho mejor. El mapa te explicará los tourist traps a evitar y te presentará una selección de lugares escogidos por gente local.
Lo más habitual es llegar a la estación central de Bruselas. Al salir del tren enseguida notarás ese olor a gofre que lo inunda todo. Os podéis tomar uno para saciar vuestro apetito, o esperar a pasar por la calle Rue Neuve. En el número 23, la cadena Vitalgaufre ha encontrado una creativa forma de rellenarlos de chocolate sin necesidad de pringarte. Antes de calentarte el gofre le meten unas barrillas de chocolate dentro que con el calor se derriten. ¡Toda una delicia al precio de siempre!
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Una primera dosis de cultura en Bruselas.
No lejos de la estación central tienes uno de los dos puntos de información turística. Además de ayudaros a programar la visita, también podéis echar un vistazo a la exposición sobre Bruselas que tienen en la primera planta, ya que os ayudará a entender alguna de las particularidades de la ciudad y el país. No muy lejos encontraréis el masivo museo real de bellas artes. Éste se divide en otros más pequeños, entre los que se incluye el muy recomendable museo de Magritte. Podéis visitar solo uno por 8€, o aprovechar un combiticket y visitar tantos como queráis (en un solo día) por 15€. Si vais el miércoles por la tarde, os sale gratis (y los menores de 25 tienen descuento).
Si después de una sesión de cultura necesitáis algo de relax, el palacio real y sus jardines están justo al lado. O podéis optar por el museo de los instrumentos musicales. No tanto por su contenido, pero sí por su café con muy buenas vistas a la ciudad y sabiendo que estáis en una de las joyas del modernismo belga (consejo de la gente de Bruselas: no hace falta visitar el museo para acceder al café). Y para los más insaciables culturalmente hablando, es en esta zona donde encontráis uno de los referentes de la cultura contemporánea: BOZAR.
Como veis, alrededor de la estación central encontraréis mucho entretenimiento, pero os recomiendo bajar hacia la joya de las visitas a Bruselas: la Grand-Place (o Grotte Platz en flamenco, la otra lengua oficial de Bruselas). Ahí veréis otra oficina de turismo, aunque un poco menos servicial por lo general. La Grand-Place se transforma constantemente por diferentes eventos. Desde celebraciones populares a conciertos o inmensas alfombras. No recuerdo esta plaza con dos estampas iguales, ni tampoco vacía. Cada una de sus salidas, además, te lleva a una Bruselas muy diferente.
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El barrio bohemio de Diseño y Arte Contemporánea en Bruselas
Mi ruta favorita sigue hacia la Opera, que se puede visitar dependiendo de la exposición en curso (gratis para estudiantes). Luego, se puede continuar hacia Sainte-Catherine. Allí tendréis a media Bruselas comiendo en la calle y las plazas (da igual el frío que haga). También está en este rincón la excepcional CENTRALE for contemporary art, el referente en arte contemporáneo de Bruselas. La entrada cuesta entre 1,25€ y 8€, dependiendo de tu condición, o gratis con la Brussels Card. No muy lejos, dentro del contexto más artístico y de diseño, podrás echar un vistazo en Rue Antoine Dansaert a toda la moda de nuevos (pero ya consolidados) diseñadores belgas. Eso sí… solo para las carteras más generosas. Un poco menos cara (pero en absoluto barata) es la Rue de Flandre, llena de restaurantes de carácter más bohemio.
Este breve repaso es para aquellos que ya conocen la ciudad y quieren dar algún pasito diferente. Te deja algunas recomendaciones más locales y te dirige hacia lo más moderno. Si lo que quieres es meter el turbo y disfrutar al máximo de Bruselas en una primera visita, te recomiendo que pases por el blog de Barcelona Travel Bloggers, donde 11 de sus socios te hemos dejado nuestros consejos más básicos. Y tú… ¿que me recomiendas descubrir fuera de estos consejos?
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David Lopez(https://www.deprontoabordo.com)