Sin darnos cuenta, la quiebra de una aerolínea como AirBerlín (y Niki), han convertido a Viena en un aeropuerto mayormente bajo coste. Esto hace que muchas de las opciones más económicas para viajar al este de Europa, pasen por Viena. Como conectar aerolíneas de bajo coste puede ser todo un riesgo, os traigo hoy una manera de disfrutar de la capital austriaca en una “Escala Cultural”. O lo que viene siendo lo mismo, como disfrutar de Viena en 24 horas.
Hay ciudades en Europa que merecen la pena ser revisitadas, como ya os explicaba sobre Ginebra. Una parada en el camino que se puede aprovechar mucho sabiendo a dónde dirigirse en busca de algo de cultura. Te propongo 2 planes, museos o palacios. Pero no intentes ambos, ¡es imposible abarcar tanto!
Por qué quedarse 24 horas en Viena
Para muchas de las personas con las que hablo, Viena no está como una de las prioridades a visitar. La verdad es que siempre me sorprende que la gente salte de Praga a Budapest sin prestar atención en la capital austriaca. Yo viví en esta ciudad 1 mes, y luego otros 9 en Linz, haciendo mi Erasmus. En estos 10 meses en Austria, descubrí una ciudad muy manejable, accesible y segura con una oferta cultural inmejorable.
En Viena encontraréis todo el esplendor de lo que en su día fue uno de los mayores imperios del mundo. Esto ha dejado a la ciudad y sus alrededores llenos de palacios y parques para visitar. Ahora ya en una sociedad moderna sin emperadores, dichos palacios se han llenado de contenido que nos ayuda a revisitar la historia, o bien a conocer las propuestas más actuales de la cultura contemporánea y clásica.
Cuando pises la ciudad, descubrirás que esas 24 horas en Viena te van a saber a muy poco. Lejos de contentarse con llenar de contenido los antiguos palacios, la ciudad ha creado todo un distrito cultural que de por sí, ocupará toda una jornada. Hablamos del Museums Quartier.
MuseumsQuartier (o Barrio de los Museos) de Viena
EL Barrio de los Museos puede ocupar tranquilamente tus 24 horas en Viena gracias a los 11 espacios que encontrarás en su manzana peatonal. Los principales espacios que más visitas reciben son el Leopold Museum (donde encontrarás gran parte de la obra de Klimt, pero no “el Beso”) y el mumok (el museo de Arte Moderno). Una tercera institución, dedicada al arte contemporáneo, tampoco te dejará indiferente. Se trata del Kunsthalle Wien, con contenidos más transgresores y arriesgados desde mi punto de vista. El hermano pequeño, pero no por ello menos interesante, es el centro de arquitectura, Architekturzentrum Wien, donde podrás aprender mucho sobre los hitos austriacos de la arquitectura gracias a su exposición retrospectiva.
Además de las grandes instituciones, el Barrio de los museos acoge el Q21, que gestiona de manera independiente a más de 50 empresas relacionadas con la creatividad, teniendo un punto de encuentro en en su espacio expositivo frei_raum Q21.
Si lo que buscas es algo más de movimiento, no dejes de consultar la programación de espectáculos y musical del Halle E+G y de la programación de danza en Tanzquartier Wien.
Los más pequeños siempre tienen atención especial en Austria. En esta manzana cultural, encontrarás el WIENXTRA-Kinderinfo, que informa de toda la programación para niños de hasta 13 años. Además, sin salir del Barrio de los Museos, el ZOOM Kindermuseum programa exposiciones y talleres y el Dschungel Wien se encarga del teatro infantil.
Los palacios más exuberantes de Europa
Otra manera de ocupar tus 24 horas en Viena, es acercándote a alguno de los palacios que explican la historia del Imperio Austro-Húngaro. De hecho, podrás salir con un máster sobre la vida de la emperatriz Sissi que, harta de Viena, buscaba emplazamientos lejos del centro para evitar la tediosa vida de la corte.
Sin lugar a duda, la visita más completa que puedes realizar, sobre todo si acompaña algo de buen tiempo, es Schönbrunn. Y no me quiero referir a él como palacio, porque incluye tantas cosas, que sería hasta desmerecerlo. Verás que existen un montón de tickets diferentes, cada cual incluyendo más o menos edificios, salas o zonas del parque. A parte, incluso puedes descubrir cómo se hace un buen strudel de manzana en el Apfelstrudelshow del Café Restaurante Residenz. Sin duda, yo iría a por el pack más completo que encuentres.
También puedes incluir una visita al museo de Sissi en el centro de la ciudad. Esta visita es más corta y está autoguiada en español (y otros idiomas). La visita dura alrededor de una hora y aprenderás todo tipo de detalles de su vida.
Secreto mejor guardado en Viena: un café desde una ventana
Ya no tanto un secreto entre los locales, pero sí para muchos turistas. No te olvides de incluir tu taza reutilizable en tu equipaje y pásate por este particular rincón del centro de Viena donde pedirte un café para llevar. Como ves, imposible tener mesas en la que es, con toda seguridad, la cafetería más pequeña de Viena, pero con uno de los mejores cafés: el Fenster Café.
De paso aprovecho para recordarte que a los austriacos les encanta desayunar bien. Quedar por la mañana es siempre un buen plan para ellos y por eso encontrarás muchas opciones que incluyen huevos, embutido, queso, plan de varios tipos… Una de mis cafeterías favoritas, también muy para locales, es Kaffee Alt Wien. Allí también encontrarás opciones de “plato del día” a mediodía que pueden salvar un poco tu presupuesto.
Muchas gracias por toda esta información. Los mejores destinos al mejor precio.